Yo estudié en el CETis No. 121 como técnico en electricidad, una profesión que sinceramente quería estudiar, y que siempre me ha gustado, con el tiempo y el transcurso de mis estudios la llegué a querer mucho. Desde niño fui un chico muy activo pero de escasos recursos, eso si con muchas ganas de estudiar y trabajar en esta área. Me gusta mucho mi trabajo en el área docente como en el área profesional.
Yo inicie a trabajar en el CETis No. 121 desempeñando actividades de auxiliar del taller de electricidad, después estuve en el mantenimiento de la escuela, y fue que en 1993 me dieron la oportunidad de dar clases aunque yo no tenía horas de docente, tenía una clave administrativa de trabajador social, posteriormente en e año 2000 me ofrecieron 2 horas docentes lo cual acepté, no lo pensé pues era lo que yo quería trabajar con los jóvenes, aún cuando eran pocas horas, así pasé varios años en los cuales un director me daba horas y otro me las quitaba hasta que me cambiaron mi plaza administrativa por 8 horas docentes y acepté aunque no me convenía económicamente en cambio, así que me quedé con 10 horas técnicas.
Me invitó a trabajar en el CETis No 121 el Arq. Juan Muñoz Maldonado, en 199 . A partir del año 2000 tenía ya 10 horas docentes para trabajar con los jóvenes en el área de electricidad.
Cuando comencé a impartir clases, sentí que mi sueño se había cumplido, así que le ponía todas las ganas y todo el empeño en la realización de mi trabajo. En un principio yo no contaba con técnicas y herramientas apropiadas para impartir mi clase, solo lo hacía tomando lo que a mí me había gustado de mis profesores cuando yo estudiaba y dejaba aquellos métodos utilizados por maestros que en su momento critiqué. Después comencé a cambiar de técnica y forma de explicar en las asesorías con lo que empecé a obtener buenos resultados.
Ser profesor para mí es un orgullo, me siento muy contento de trabajar en el área que yo quería desde niño, el compartir y trabajar con jóvenes, los cuales son chicos entusiastas, respetuosos, cumplidos y en su mayoría con ganas de salir adelante a pesar de su situación económica.
Ser docente de la educación media superior es una fortuna para mí, así describo el pertenecer a éste sistema educativo al cual no cambiaría, al igual que la profesión que estudié y que en ambas situaciones he tenido grandes satisfacciones.
Las satisfacciones que he tenido son: Servir a los jóvenes debido a que esta profesión es de servicio, apoyar y orientar a los alumnos en sus problemas educativos y familiares si es posible, el crecimiento que he tenido gracias a las experiencias vividas en el área administrativa y docente, el reconocimiento de mis alumnos por la labor desarrollada y poderlos colocar en la comisión federal de electricidad por sus habilidades, destrezas y conocimientos impartidos y por que lo que yo les enseñé les ha servido en su trabajo y en su vida.
También reconozco que he tenido insatisfacciones entre las cuales se encuentran el no poder evitar la apatía de algunos niños que no quieren continuar con sus estudios, la deserción de alumnos, algunos por problemas económicos, otros por problemas familiares pero lo más triste es el abandono de la escuela por problemas de actitud con los mismos compañeros.
Enrique García Arzate.
viernes, 4 de junio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario